Todos sabemos que nos movemos en un mundo cada vez más vertiginoso, en el que la velocidad de los cambios y las tecnologías hace que tengamos la sensación de que no somos capaces de dominar nuestra reacción ante los distintos entornos.
Ante este panorama muchos hablan de la necesidad de desconectar, ya sea desconectar de las redes sociales, de la tecnología, o simplemente del trabajo. Por todos lados nos venden la receta maravillosa de la desconexión.
De lo que se trata, sin embargo, no es de desconectar, sino de tener la capacidad de conectar con uno mismo cuando corresponde. El objetivo es poder pasar de una conexión a otra sin problemas.
Lo curioso es que muchas de las soluciones a este mal moderno se pueden encontrar en milenarias reglas monásticas.
En este libro, Albert Riba analiza las reglas utilizadas en distintas órdenes monásticas de distintas religiones y destila los puntos en común que tienen para ayudarnos a conectar con nosotros mismos en el momento adecuado, y poder así conectar con el trabajo y ser más productivos cuando más lo necesitamos.