Una reflexión sobre el viaje como proceso de autodescubrimiento que nos ayuda a ensanchar nuestra visión del mundo.
Pessoa se preguntaba si los viajes podían ofrecer a su alma algo que no tuviese ya, mientras que Twain los veía como un bálsamo contra la ignorancia. Ralph Waldo Emerson sostenía que buscar respuestas fuera del hogar era huir de uno mismo, y Chesterton animaba a viajar para redescubrir la propia patria. De la experiencia vacía y engañosa del viaje turístico al migrante obligado a adaptarse a un mundo nuevo, viajar es un fenómeno complejo que implica procesos de autoconocimiento y transformación.
Bartra reflexiona acerca de por qué el viaje no es solo un desplazamiento físico, sino también un distanciamiento cultural y emocional que confronta nuestra identidad y nuestros orígenes con el mundo que nos rodea.