Un viaje poético que cuenta la historia de una guerra desde los ojos de un niño. Cada haiku revela un instante: un estallido, el sinsentido, la pérdida y el miedo, la esperanza y, finalmente, el resurgir de la vida.
El libro avanza como una travesía poética con un lenguaje mínimo y delicado, convirtiendo la devastación en poesía y el dolor en un canto a la resiliencia. Una obra para detenerse, mirar y recordar que, incluso después de la guerra, la vida siempre encuentra cómo volver a florecer.