Un homenaje a las familias y a las madres tiernas, valientes y cómplices
El cuarto de la plancha
 es un libro tejido con el amor de las madres y de las historias que se 
susurran al oído antes de irse a dormir; es un canto de amor a la 
familia con todo lo que tiene de caótico, de bueno, de triste, de sabio y
 de conocido; es una mano tendida, un corazón remendado y una ventana 
abierta a los recuerdos. Es, en suma, la voz única, sincera y dulce, 
certera y personalísima de Inma Chacón desgranando en una obra 
inolvidable, tierna, divertida y cercana, también desgarradora por 
momentos, la historia de su familia, y la suya propia, narrada como su 
más fascinante novela.
De la particular relación que une a dos 
hermanas gemelas a lo largo de toda su vida y más allá de la muerte al 
valor de una joven madre viuda capaz de sacar adelante a sus nueve 
hijos; del misterio de un abuelo que no parecía querer a sus nietos al 
de una segunda esposa enamorada que, por no molestar, casi no tenía ni 
nombre; del recuerdo de un padre con un corazón tan grande que no le 
cabía en el pecho a los secretos que oculta un costurero antiguo o un 
rosario de piedras amarillas... Todo cuanto se nombra en El cuarto de la plancha
 guarda un significado y una historia. Pero, sobre todo, atesora un 
sentimiento, una emoción, que hace de este libro una obra cautivadora, 
honda, conmovedora, difícil de olvidar.