El maestro W., célebre director de orquesta, está a punto de estrenar la temporada del Teatro lírico de Roma con
una elaborada puesta en escena del Otelo de Verdi. Desde los primeros ensayos, su mentor y también productor de
la ópera, advierte que una extraña ansiedad aflige al director. Ese temor, visiblemente en aumento, culminará en un
inexplicable ataque de nervios que dará al traste con el esperado estreno y que provocará la huida precipitada del
director. ¿Qué lleva al prestigioso músico a jugarse la reputación ganada a pulso durante toda su impecable carrera?
Las pesquisas sobre la causa de la aflicción de W. revelarán una historia que se remonta a los tiempos de la guerra
cuando, huyendo del norte de Italia ocupado por los nazis, el director se refugió en un convento de un pueblo de
montaña. Allí, a salvo de la persecución, conoció a Romualdi, un hombrecillo ignominioso, mediocre y ridículo que,
por las oscuras razones que W. acabará confesando a lo largo de una noche entera, hizo mella en lo más profundo de
su alma y de su talento.
Mario Soldati es el único escritor italiano del siglo XX que describe, constantemente y siempre, la alegría de vivir; no el placer de vivir sino la alegría
N. Ginzburg
El autor: Mario Soldati (Turín 1906 - Tellaro 1999)
Mario Soldati nació en Turín en 1906. Cursó la educación elemental en la escuela de
los jesuitas, educación que tendría una gran influencia en su obra. Se matriculó en la
facultad de Letras de la Universidad de Turín, donde entabló amistad con otros jóvenes
intelectuales como Cesare Pavese y Carlo Levi. En 1954 fue galardonado con el pres-
tigioso premio Strega por la novela epistolar Lettere da Capri. Autores de la talla de
Natalia Ginzburg, Giorgio Bassani o Cesare Garboli han elogiado en muchas ocasiones
su vasta obra, más de cincuenta títulos entre novelas y cuentos, y es considerado uno de los grandes escritores de la
literatura italiana. Trabajador incansable, compaginó sus facetas cinematográfica y literaria hasta su muerte en 1999.