«El arte de los impuestos consiste en desplumar al ganso de tal forma  que se obtenga la mayor cantidad de plumas con el menor ruido posible.»
Jean-Baptiste Colbert Apple, una de las empresas más grandes y con más éxito en todo el mundo,  paga entre treinta y veinte puntos menos de impuestos en su factura  fiscal global que lo que paga un español medio. En un momento en el que  la presión fiscal sobre los empleados, y las clases medias se ha  disparado hasta la asfixia, y en el que se nos dice que hay que recortar  en todo, cada día aparecen más noticias que nos recuerdan que las  grandes empresas, los millonarios y la jet set se las apañan para pagar  lo mínimo: desde Apple -que presenta su declaración de impuestos en  España con un resultado negativo, es decir «a devolver»,- hasta el mejor  futbolista del mundo, quien se enfreta a acusaciones de evasión fiscal,  pasando por los grandes bancos o los profesionales liberales. Instrumentos como las facturas falsas, las subvenciones cobradas  indebidamente, operaciones internacionales fraudulentas, declaraciones  de precios de venta falsos, ocultación de capitales, empresas fantasma o  tapadera son algunos de los mecanismos que explican por qué los que más  tienen pagan tan poco. ¿Cómo funcionan todos estos mecanismos, y qué podemos aprender de ellos?